viernes, 8 de junio de 2012

La luciérnaga y la serpiente

Ésta es una fábula antiquísima, de los tiempos de Esopo.

Todas las noches, incansablemente,una serpiente salía a perseguir a una luciérnaga. Con total perseverancia, el reptil insistía una y otra vez, noche tras noche, en su intento de atrapar al insecto, que hábilmente escapaba.
Una noche la luciérnaga, ya cansada de las persecuciones constantes,decidió pararse.
Sorprendida, la serpiente también se frenó.
En ese momento, la luciérnaga se dirigió a la serpiente y le dijo:
- "Puesto que ya no tengo escapatoria, al menos concédeme la posibilidad de satisfacer mi curiosidad, por favor, contéstame a unas preguntas..."
La serpiente, algo contrariada, responde:
- "Yo no tengo por costumbre hablar con mis presas...pero, en fin, dado que te voy a devorar de todas formas, te responderé lo que me preguntes".
La luciérnaga entonces formuló algunas preguntas, siendo respondida por la serpiente:
- "¿Formo yo parte de tu cadena alimenticia?"
- "No"
- "¿Tienes pocos alimentos a tu alrededor con los que sobrevivir?"
- "No"
- "¿Es por la noche cuando cazas?"
- "No"
La luciérnaga realizó su última pregunta:
-  "Entonces...¿por qué me persigues a mí...qué te he hecho?"
   La serpiente se incorporó, y, en un arrebato de sinceridad contrario a su abyecta naturaleza, mirando de perfil a la luciérnaga le dijo:
- " Porque....porque....¡¡¡ No soporto verte brillar !!! "

         




1 comentario:

  1. Me encanta.
    Preciosa musica la que acompaña a la lectura.
    Este relato tiene su meditacion.... es una pena que haya tanta gente Q no soporte ver brillar a otr@s.

    ResponderEliminar