jueves, 19 de marzo de 2015

Un hombre para la eternidad

El título de la película británica sobre los avatares del humanista Tomás Moro es muy apropiado para describir a uno de los autores españoles esenciales de la literatura universal, fruto de cuya imaginación fue aquel caballero de la triste figura que dentro de su locura (si es que lo que Don Quijote padecía era en efecto un estado de enajenación o simplemente un ataque de valentía y bondad) le llevaba a enfrentarse a imposibles.

Don Miguel de Cervantes se retrató a sí mismo en sus Novelas Ejemplares de la siguiente manera: "Éste que veis aquí, de rostro aguileño, de cabello castaño, frente lisa y desembarazada, de alegres ojos y de nariz corva, aunque bien proporcionada; de barbas de plata, que no ha veinte años que fueron de oro, los bigotes grandes, la boca pequeña, los dientes ni menudos ni crecidos, porque no tiene sino seis, y ésos mal acondicionados y peor puestos, porque no tienen correspondencia los unos con los otros; el cuerpo entre dos extremos, ni grande, ni pequeño, la color viva, antes blanca que morena, algo cargado de espaldas, y no muy ligero de pies. Este digo, que es el rostro del autor de La Galatea y de Don Quijote de la Mancha, y del que hizo El Viaje al Parnaso,...y otras obras que andan por ahí descarriadas, y, quizá, sin el nombre de su dueño. Llámase comúnmente Miguel de Cervantes Saavedra. Fue soldado muchos años, y cinco y medio cautivo,donde aprendió a tener paciencia en las adversidades. Perdió en la batalla naval de Lepanto la mano izquierda de un arcabuzazo, herida que, aunque parece fea, él la tiene  por hermosa, por haberla cobrado en la más memorable y alta ocasión que vieron los pasados siglos, ni esperan ver los venideros, militando debajo de las vencedoras banderas del hijo del rayo de la guerra, Carlo Quinto, de felice memoria".


Don Miguel de Cervantes (1547-1616)


El hallazgo de ciertos restos en el Convento de las Trinitarias Descalzas, sito en el Barrio de las Letras de Madrid, que pudieran corresponder al escritor y su esposa, ha reavivado el recuerdo de su figura y obra.Bien está que se realicen actividades y se destinen fondos a esta investigación, pero Cervantes, por su vida y producción literaria, y sobre todo por los paradigmáticos personajes que creó, ya ha ganado una inmortalidad de la que sin duda desde hace cuatrocientos años disfruta. En el presente y en los venideros tiempos, la figura y enseñanzas cervantinas deben permanecer como un referente, un modelo no sólo de calidad narrativa y literaria, sino de comportamiento y vida, aunque no sea fácil llevarlo a la práctica y a quienes así lo hagan se les llame, con simpleza, "locos". 


                                                                                                                                                              
                                                   The Legendary Heroes of Spain (Diego García Paz)
                                                                                     Música por Óscar Araujo: The Ice Titan